Las sandías provienen originalmente de África occidental en su forma silvestre y ahora se plantan en regiones cálidas de todo el mundo. En el jardín de casa o en el invernadero hay que cuidarlos bien para que la cosecha sea exitosa.

¿Cómo cuidar adecuadamente una sandía?
El cuidado de las sandías incluye riego regular sin encharcamiento, trasplante cuidadoso, si es necesario, cobertura de brotes para frutos más grandes, protección contra enfermedades mediante injertos, fertilización con estiércol sazonado o compost y almacenamiento adecuado de frutos y semillas.
¿Con qué frecuencia se debe regar una sandía?
Durante la fase de germinación y también en las plantas jóvenes, el sustrato debe mantenerse uniformemente húmedo, pero las plantas no pueden tolerar el encharcamiento. En general, las sandías en macetas necesitan más agua que los ejemplares que han sido plantados en la tierra del jardín. Durante la fase de fructificación, las sandías se deben regar diariamente, temprano en la mañana o en la noche, de lo contrario los frutos pueden deformarse.
¿Cómo trasplantar la sandía?
Dado que las raíces de las sandías jóvenes son muy sensibles, si es posible, se debe evitar pincharlas en las primeras semanas de vida. Un método práctico es sembrar de dos a tres semillas de melón en una maceta pequeña y luego dejar en ella sólo la planta joven más fuerte. Las sandías más grandes deben colocarse con el mayor cuidado posible con el cepellón en un hoyo de plantación preparado para que se desprenda la menor cantidad de tierra posible de las raíces finas.
¿Hay que cortar una sandía?
Debido a que las sandías son plantas anuales, solo se cortan o redirigen si superan su ubicación prevista. Sin embargo, promueve el desarrollo de frutos grandes si los brotes se cortan por encima de la base del fruto.
¿Cómo proteger la sandía de las enfermedades?
Las plagas específicas de las plantas no son muy comunes en nuestras latitudes. Sin embargo, protege contra enfermedades fúngicas y otros patógenos si injertas tus sandías en portainjertos como la calabaza de hoja de higuera.
¿También es necesario fertilizar una sandía?
Durante el verano, las sandías y las calabazas suelen producir una cantidad asombrosa de crecimiento por día, para lo cual también necesitan los nutrientes adecuados del suelo. Sin embargo, no se debe utilizar estiércol fresco para la fertilización, sino sólo estiércol o compost sazonados.
¿Cómo almacenar los frutos y semillas de la sandía?
Como plantas anuales, las sandías mueren en el otoño y no pueden pasar el invierno. Los frutos maduros se pueden conservar en el sótano o en el frigorífico hasta tres o cuatro semanas. Las semillas deben limpiarse y secarse antes de almacenarlas para evitar que se enmohezcan.
Consejos y trucos
A menudo se pueden encontrar sandías refinadas en las tiendas de jardinería. Esto ahorra a los principiantes la frustración de los intentos fallidos de refinamiento.