El herbicida casero es muy popular entre algunos entusiastas de la jardinería porque estos productos se consideran más ecológicos y económicos. En este contexto se mencionan a menudo el vinagre y la sal. Pero, ¿cuánta sal se debe agregar al vinagre? ¿Está permitido incluso hacer su propio herbicida? Respondemos a estas y otras preguntas en el siguiente artículo.
¿Cuál es la proporción de mezcla de sal y vinagre contra las malas hierbas?
La proporción de mezcla recomendada de sal y vinagre contra las malas hierbas consiste en ¼ de litro de agua, ¼ de litro de vinagre, 3 cucharadas de sal de mesa y una gota de líquido lavavajillas. Sin embargo, el uso de esta mezcla se encuentra en una zona gris legal ya que no está aprobado como producto fitosanitario.
¿Cómo funciona la mezcla de vinagre y sal?
El ácido acético extrae la humedad de las hojas de la planta. Este efecto se ve reforzado por la sal, que tiene un efecto osmótico y seca el follaje de las plantas de marihuana. Cuando el vinagre y la sal penetran en el suelo, los pelos de las raíces se secan y las malas hierbas ya no pueden absorber agua.
¿Qué proporción de mezcla es adecuada?
Mezclar en una botella con atomizador:
- ¼ litros de agua,
- ¼ litro de vinagre,
- 3 cucharadas de sal de mesa,
- 1 gota de líquido lavavajillas.
Remueve o agita bien hasta que la sal se haya disuelto por completo.
Atención: Al usarlo, te estás moviendo en un área gris legal
La Ley de Protección Fitosanitaria prohíbe el uso de preparados que no estén aprobados como productos fitosanitarios. Esto también incluye mezclar vinagre y sal, independientemente de la proporción de mezcla.
Esto se debe a que los remedios caseros suelen ser mucho más perjudiciales para el medio ambiente que los herbicidas probados que se venden en comercios especializados. La sal en particular, que debe aplicarse en alta concentración para lograr un efecto, puede dañar gravemente otras plantas.
Una vez que penetran en el suelo, los ingredientes activos no sólo atacan las raíces de las malas hierbas no deseadas, sino también las de las plantas ornamentales y útiles. Si se utilizan con regularidad, las sustancias pueden acumularse en el suelo, de modo que las plantas sensibles a la sal, como las fresas o los rododendros, ya no prosperan en esta zona.
¿Dónde se permite el herbicida casero?
Está prohibido el uso de sal y vinagre en superficies selladas como la entrada del garaje o el camino del jardín. Aquí, independientemente de la proporción de mezcla, los agentes no se pueden descomponer y terminan en las aguas subterráneas, donde pueden causar problemas importantes en la planta de tratamiento de aguas residuales. Las infracciones pueden dar lugar a multas elevadas.
Puedes usar sal y vinagre en el césped o en el macizo de flores. Sin embargo, tenga en cuenta que las plantas ornamentales y útiles también pueden dañarse y utilice el producto con cuidado por los motivos ya mencionados.
¿Qué alternativas existen?
En primer lugar, desde una perspectiva medioambiental, vale la pena cambiar tu visión de las malas hierbas. Por ejemplo, las ortigas que se han asentado en un rincón apartado del jardín son un hábitat valioso para muchos insectos y mariposas. Quizás no sea necesario eliminar siempre las malas hierbas directamente.
Puedes eliminar manualmente la vegetación no deseada que se extiende en el huerto o en las grietas de los adoquines. Este trabajo se realiza mejor después de la lluvia, cuando el suelo está blando.
Las malas hierbas se pueden destruir fácilmente usando calor, por ejemplo usando dispositivos que funcionan con gas o electricidad (39,00 € en Amazon) o simplemente usando agua caliente. El limpiador de alta presión o los cepillos eléctricos también le ayudarán en la lucha contra las malas hierbas.
Consejo
El vinagre y la sal pueden alterar gravemente la vida del suelo. Por lo tanto, si desea utilizar ácido acético como herbicida, lo mejor es utilizar los preparados adecuados adquiridos en comercios especializados.