Aunque el bálsamo de hígado es en realidad perenne, generalmente se ofrece como planta anual en centros de jardinería y viveros. No dejes que esto te desanime y aun así atrévete a pasar el invierno en el Ageratum, que es relativamente fácil de cuidar.
¿Cómo cuidar adecuadamente Ageratum (bálsamo para el hígado)?
Para cuidar adecuadamente el Ageratum, necesita un lugar soleado y cálido, un suelo fresco, permeable y rico en nutrientes. Riega bien la planta, pero evita el encharcamiento. Fertilice cada 2 o 3 semanas y recorte las flores gastadas para estimular a la planta a producir nuevos brotes.
Ubicación y suelo
Un lugar cálido y soleado es el más adecuado para el bálsamo para el hígado. Sólo con suficiente luz (al menos cinco horas al día) las flores florecerán tan exuberantes y persistentemente como usted desee.
La tierra puede estar ligeramente húmeda, pero no debe tender a encharcarse. Por eso la permeabilidad es importante. Si desea pasar el invierno con el bálsamo para el hígado, conviene trasladarlo a un cuartel de invierno adecuado con suficiente antelación antes de la primera helada.
Riego y fertilización
Vierta bien el bálsamo para el hígado, pero no demasiado. Lo ideal es no permitir que la tierra se seque o se “ahogue”. El encharcamiento puede hacer que las raíces del bálsamo para el hígado se pudran rápidamente. Aproximadamente cada dos o tres semanas añade un poco de fertilizante líquido (18,00 € en Amazon) al agua de riego.
El bálsamo para el hígado como flor cortada
Especialmente las variedades más grandes de bálsamo para el hígado son muy adecuadas como flores cortadas. Las flores azules, rosadas, blancas o violetas aparecen hasta octubre o incluso noviembre si el tiempo lo permite. Al cortar puedes estimular la planta para que forme nuevos cogollos.
Enfermedades y plagas
Además de la pudrición de las raíces, que se produce debido a un suelo demasiado húmedo o demasiado regado, el bálsamo de hígado también sufre ocasionalmente infestaciones de plagas. Aquí son especialmente importantes los ácaros y los pulgones, pero también los pequeños pulgones y las moscas blancas. Sin embargo, con buena atención y en la ubicación adecuada, esto rara vez es de esperar.
Lo más importante en resumen:
- ubicación soleada y cálida
- suelo fresco, permeable y rico en nutrientes
- riegar abundantemente
- fertilizar cada 2 a 3 semanas
- buenas flores cortadas, especialmente variedades de crecimiento más alto
- adecuado para macetas y jardineras de balcón
- no resistente
- Es posible pasar el invierno, pero comprar uno nuevo suele ser más barato
Consejo
Dado que el bálsamo de hígado es una planta ornamental venenosa, debes pensar detenidamente antes de plantarla en un jardín donde jueguen los niños.