Las alcachofas no sólo tienen un aspecto exótico, sino que su origen también lo es: son originarias del Mediterráneo oriental e incluso se pueden encontrar silvestres en Persia y África. Por tanto, surge la pregunta: ¿Son resistentes las alcachofas? ¿O necesitas protección para el invierno? Aprenda cómo hibernar sus alcachofas a continuación.
¿Cómo proteger las alcachofas en invierno?
Las alcachofas son resistentes hasta cierto punto y pueden prosperar protegidas en los inviernos de Europa Central. Para pasar el invierno, corte las hojas y las inflorescencias, cubra la planta con una capa de hojas de aproximadamente 20 cm de espesor, arena y maleza.
Las alcachofas son resistentes hasta cierto punto
A pesar de su cálido lugar de origen, las variedades de alcachofa que tenemos a nuestra disposición toleran normalmente los inviernos centroeuropeos, siempre que estén adecuadamente protegidas. Así que no es necesario desenterrar las alcachofas e invernarlas en un lugar protegido de las heladas, aunque, por supuesto, también es una opción.
Alcachofas que hibernan paso a paso
- Mezcla un balde de arena con algunas hojas, paja o estiércol.
- Quitar las inflorescencias secas.
- Corta las hojas a unos 5 cm del suelo con unas tijeras de podar afiladas (14,00 € en Amazon).
- Ahora aplique una capa de 15 a 20 cm de espesor de la mezcla de arena sobre y alrededor de la alcachofa.
- Luego agregue maleza a la mezcla hasta que toda la protección tenga aproximadamente 30 cm de espesor.
Desenterrar alcachofas para pasar el invierno
Si quieres estar seguro o vivir en una zona donde hace mucho frío en invierno, también puedes desenterrar tu alcachofa. Proceda de la siguiente manera:
- Elimine las inflorescencias y las hojas como se describe arriba.
- Pincha el área alrededor de la alcachofa lo más profundamente posible con una pala puntiaguda. Las alcachofas tienen raíces muy profundas y es aconsejable conservar la mayor cantidad posible de raíz para no debilitar la alcachofa innecesariamente.
- Luego, extrae con cuidado todo el cepellón.
- Limpia la raíz, colócala en una maceta y llénala con arena.
- Guarda la olla en un lugar fresco a unos 15 grados.
- No olvides regar tu alcachofa de vez en cuando para evitar que la raíz se seque.