El cactus bola más fácil de cuidar es el Echinocactus grusonii. Aunque es difícil conseguir que florezca, su forma redonda la hace muy atractiva. El Echinocactus grusonii no es venenoso. Sólo sus espinas pueden convertirse en un peligro.
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¿Es venenoso el Echinocactus grusonii?
El Echinocactus grusonii, también conocido como cactus bola, no es venenoso y se puede mantener fácilmente en el interior. Sin embargo, debes tener cuidado con sus fuertes espinas y mantenerla fuera del alcance de los niños y las mascotas.
Echinocactus grusonii no es venenoso
Como casi todas las especies de cactus, Echinocactus grusonii es una de las suculentas que almacena agua en el cuerpo. No contiene toxinas, por lo que puedes mantener el cactus fácilmente en el interior.
Sin embargo, se recomienda precaución con las espinas, a menudo muy pronunciadas. Por eso, a la hora de cuidarte, utiliza siempre guantes (17,00 € en Amazon) y cúbrete el cuerpo con una toalla de felpa.
Coloca el cactus bola de manera que ni los niños ni las mascotas puedan lastimarse.
Consejo
El Echinocactus grusonii es uno de los pocos tipos de cactus bola adecuados para el cultivo en interiores. El cuidado no es complicado. Lo único difícil es encontrar un buen lugar para el invierno.