El abeto Nordmann busca en el suelo nutrientes que le permitan crecer sano y rápidamente. Pero al mismo tiempo también necesita encontrar ciertos elementos que le ayuden a mantener el rico color verde de sus agujas. ¿Puede un fertilizante de jardín común hacer ambas cosas? Difícilmente.
¿Cómo fertilizar un abeto Nordmann?
Para fertilizar de forma óptima un abeto Nordmann, se debe utilizar un fertilizante especial para abetos o sal de Epsom. La fertilización ocurre cada 6 a 8 semanas durante la fase de crecimiento de febrero a agosto. La dosis depende del tamaño del árbol y de las instrucciones del fabricante.
Esto es lo que necesita el abeto Nordmann
El abeto Nordmann no tiene altos requerimientos nutricionales. Un árbol completamente desarrollado normalmente podrá arreglárselas con los recursos del suelo. Sólo si este es magro o el abeto está en un cubo podría ser necesaria una adición de nutrientes. Los ejemplares recién plantados o trasplantados también tienen un mejor comienzo con la fertilización.
Un fertilizante NPK disponible en el mercado con los elementos sodio, fosfato y potasio no es suficiente a largo plazo para el abeto Nordmann. Pueden aparecer síntomas de deficiencia, como el temido bronceado con aguja. Por lo tanto, el fertilizante especial para abetos (9,00 € en Amazon) ofrece una composición de nutrientes ampliada, principalmente con hierro, magnesio y azufre.
Tiempo y dosis
Los abetos Nordmann se fertilizan durante su fase de crecimiento de febrero a agosto.
- Proporcione fertilizante para abetos cada 6 a 8 semanas
- 70 a 140 gramos por metro cuadrado (dependiendo del tamaño del árbol)
- distribuir alrededor del área de la raíz y trabajar de manera plana
- alternativamente use fertilizante a largo plazo para coníferas
Consejo
Al fertilizar el abeto Nordmann, preste atención a las instrucciones de dosificación del fabricante y no las exceda. Incluso un abeto puede sufrir un exceso de fertilización.
Sal de Epsom para agujas verdes
El fertilizante de abeto no solo asegura que las agujas se pongan verdes, sino que también asegura un rápido crecimiento. Teniendo en cuenta que un abeto Nordmann puede crecer hasta 25 m de altura, esto puede no ser tan deseable en el jardín de una casa. Aquí puedes evitar la sal de Epsom, que normalmente se utiliza como fertilizante adicional contra las acículas marrones.
La sal de Epsom es un fertilizante de sulfato de magnesio altamente concentrado. Está disponible como fertilizante líquido o preparado seco, donde no hay que olvidar regar abundantemente. Utilice la sal de Epsom con moderación y siempre siguiendo las instrucciones del fabricante. Las agujas permanecen verdes y el crecimiento se ralentiza.
El análisis del suelo proporciona datos confiables
La aparición de agujas marrones no debe interpretarse como un signo seguro de deficiencia. La única forma de determinar de forma fiable si un suelo es pobre en nutrientes es realizar un análisis del suelo. Asimismo, el nuevo color de las agujas también puede ser causado por humedad, sequedad, compactación del suelo o plagas.