Este verano también se encuentran en numerosos jardines de toda Alemania: las sombrillas. Esta popular arma multiusos contra el calor, la lluvia y la radiación UV no sólo ofrece un valor añadido práctico, sino que también es considerada por la mayoría de los amantes del jardín como un atractivo moderno y el centro de su propio oasis de bienestar.
¿Por qué las sombrillas son un valor añadido práctico y visual?
Las sombrillas ofrecen una protección práctica contra el calor, la lluvia y la radiación UV, además de un valor añadido visual en el jardín o en la terraza. Hay dos tipos principales: la sombrilla de poste central para una alta estabilidad y la sombrilla voladiza para una mayor área de sombra y una mejor protección solar.
La primavera está llegando a su fin y este año los cálidos meses de verano prometen estupendas barbacoas en el propio jardín. Es comprensible que muchos propietarios de jardines ya estén buscando nuevos muebles de jardín y den especial importancia a un accesorio muy especial: la sombrilla.
No todas las sombrillas son iguales, pero ¿cuáles son las diferencias (en realidad)?
Si crees que todas las sombrillas tienen el mismo aspecto, estás equivocado, porque debido a su creciente popularidad ya no existe sólo la sombrilla "clásica" que todavía conoces del jardín de tus abuelos. En cambio, hoy en día se hace una distinción entre el llamado paraguas de poste central y el paraguas voladizo. Ambas variantes son adecuadas tanto para el jardín como para el balcón o la propia terraza. Pero ¿cuál es la diferencia entre los dos modelos? ¿Y a qué más debes prestar atención a la hora de elegir la sombrilla adecuada?
La sombrilla de poste central: Esta variante es probablemente el tipo de sombrilla más conocido. La sombrilla de poste central, también conocida comúnmente con los nombres alternativos de poste, mercado o sombrilla de poste central, tiene un poste que se encuentra exactamente en el centro de la sombrilla. Esta estructura garantiza una alta estabilidad y también permite utilizar toda el área debajo de la sombrilla. Sin embargo, el paragüero, a menudo bastante grande, y el mástil centrado causan a veces problemas, ya que alrededor del soporte hay que construir la mesa de jardín y el grupo de asientos correspondiente. Un pequeño consejo: si la mesa de jardín tiene un agujero adecuado en el centro, la barra se puede pasar fácilmente por allí. Esto ahorra mucho espacio y garantiza que el poste no moleste a nadie.
El paraguas voladizo: Probablemente la diferencia más clara con el paraguas de poste central mencionado anteriormente es la posición del paragüero y el mástil. Estos no se encuentran en el centro del semáforo ni en el paraguas de brazo libre, sino fuera del área propiamente dicha del paraguas. Además, el mástil no se fija por debajo del tejado, sino por encima de él. Gracias a este diseño especial, la sombrilla voladiza ofrece en general una mayor superficie de sombra, lo que también permite una mejor protección solar. La mayoría de los paraguas voladizos tienen una manivela que se fija al poste y tiene como objetivo alinear el paraguas. Con esta práctica herramienta se puede adaptar la sombrilla en un abrir y cerrar de ojos a las condiciones de iluminación correspondientes. Sin embargo, con vientos fuertes las cosas se complican, ya que debido a la posición del mástil y de la cruz del soporte, así como a la mayor superficie de ataque asociada, la sombrilla voladiza no es tan estable como la sombrilla central.
¿A qué debes prestar atención al comprar una sombrilla nueva?
En primer lugar, la nueva sombrilla debe corresponder, por supuesto, a sus gustos personales, especialmente en cuanto a forma, tamaño y color. Sin embargo, conviene tener en cuenta algunas cosas con antelación, como por ejemplo dónde colocar el paraguas más adelante. Por ejemplo, ¿es un lugar más resguardado del viento o es necesario que la sombrilla sea lo más estable posible? ¿Y de qué material debería estar hecho: aluminio resistente a la intemperie, plástico o madera con certificación FSC y producida de forma sostenible? También está la cuestión de la cobertura adecuada. Además de las sombrillas de poliacrílico y poliéster, extremadamente duraderas, cada vez hay más sombrillas fabricadas con tela para toldos.
La elección del material adecuado debe hacerse principalmente teniendo en cuenta la durabilidad. La sombrilla debe resistir una amplia gama de condiciones climáticas y, idealmente, también debería ofrecer un alto nivel de protección UV. Un buen indicador de ello es el llamado sello UPF, que indica el factor de protección UV. Aquí se aplica lo siguiente: cuanto mayor sea el valor, mejor será la protección UV. La página de información de la Oficina Federal de Protección Radiológica (BfS) muestra lo importante que puede ser esta protección para la piel. Y si quieres utilizar tu sombrilla durante mucho tiempo, lo mejor es protegerla de las condiciones climáticas más adversas con una funda o funda protectora. Esto garantiza una vida útil mucho más larga de la sombrilla y evita de forma elegante posibles daños.