Incluso con buenas condiciones del sitio y el mejor cuidado, las enfermedades de los árboles no siempre se pueden prevenir. En algunos casos, hongos, bacterias y otros patógenos pueden causar daños graves. Esto es especialmente cierto en el caso de los árboles plantados en regiones densamente pobladas y con mucho tráfico de vehículos, que se ven sometidos a un gran estrés por numerosas causas. La vacunación puede fortalecer estos árboles.
¿Cómo se puede “vacunar” un árbol?
Para “vacunar” y así fortalecer un árbol de jardín, al plantar se debe colocar una palada de abono (43,00 € en Amazon) en el hoyo de plantación. Esto proporciona al árbol valiosos nutrientes y favorece el crecimiento de raíces sanas y la simbiosis con hongos micorrízicos.
Microorganismos buenos y malos
Phytophthora y otros organismos nocivos ingresan al árbol a través del suelo. Se propagan muy rápidamente, especialmente cuando el árbol aún es muy joven, acaba de ser plantado o está debilitado. En algunas comunidades, desde hace varios años se inocula un cóctel de microorganismos fortalecedores, por ejemplo hongos micorrícicos del suelo, cuando se plantan nuevos árboles urbanos. Especialmente los hongos micorrízicos entran en simbiosis con el árbol, en la que los socios se suministran nutrientes mutuamente y, por lo tanto, se fortalecen mutuamente. No en vano, estas comunidades se encuentran a menudo en los árboles del bosque: las hayas o los abetos prosperan mejor en compañía de los hongos porcini, los abedules junto con los hongos de abedul, etc. Este efecto también se puede simular con árboles de jardín.
Vacunar un árbol de jardín: así funciona
Ahora no es necesario inocular sus árboles con esporas de boletus, que de todos modos probablemente estén condenadas al fracaso en el jardín, para fortalecerlos. El compost convencional suele tener el mismo efecto, ya que contiene una gran proporción de valiosos organismos vivos del suelo. Por este motivo, al plantar un árbol, siempre conviene poner una generosa palada de abono (43,00 € en Amazon) en el hoyo de plantación, idealmente junto con virutas de cuerno u otro fertilizante de larga duración. Esta medida también tiene la ventaja de aflojar el suelo y hacerlo más permeable para que las raíces puedan crecer más rápidamente. Además, se garantiza el suministro de nutrientes valiosos a la planta joven.
Consejo
Cuando tus abuelos hablan de “vacunación de árboles”, rara vez se refieren al tratamiento preventivo de enfermedades. En cambio, “vacunación” es un término obsoleto para referirse a la inoculación, una forma de injerto que se realiza a menudo, especialmente en árboles frutales.