Seto de grosellero alpino: poco exigente, bonito y ecológico

Seto de grosellero alpino: poco exigente, bonito y ecológico
Seto de grosellero alpino: poco exigente, bonito y ecológico
Anonim

La grosella alpina es un arbusto autóctono que crece hasta una altitud de 1.600 metros y se encuentra silvestre en casi toda Europa. Aunque pertenece a la familia de las grosellas, las ramas no tienen espinas. Esta planta poco exigente es una pequeña multiuso que es muy popular como planta de cobertura de alto mantenimiento con valor ornamental.

Seto de grosella alpina
Seto de grosella alpina

¿Por qué la grosella alpina es adecuada como planta de cobertura?

La grosella alpina es una planta de cobertura ideal porque no exige mucho en cuanto a ubicación y suelo, resiste las heladas y tolera la poda. También es resistente a los gases de escape, tiene una brotación temprana y ofrece un valor añadido ecológico para pájaros e insectos.

¿Qué hace que la grosella alpina sea la planta de cobertura ideal?

Difícilmente existe un arbusto que sea tan poco exigente en términos de ubicación como la grosella alpina. En la naturaleza se encuentra a menudo como sotobosque en los bosques porque prospera excelentemente en la sombra y soporta bien la presión de las raíces. Al mismo tiempo, el árbol paisajístico tolera el sol y, por lo tanto, es perfecto para propiedades donde el seto se encuentra tanto al sol como a la sombra.

¿Qué suelos prefiere la grosella alpina?

El arbusto también es muy poco exigente en cuanto al suelo. Ya sea en terrenos arcillosos, arenosos o pedregosos, ya sea que el sustrato sea ácido o calcáreo, el arbusto se siente como en casa en todas partes. Además, la grosella alpina es absolutamente resistente a las heladas, incluso en lugares difíciles el seto no necesita ninguna protección adicional para el invierno.

Insensible a los gases de escape

Los setos de grosella alpina son relativamente comunes en las grandes ciudades y alrededor de empresas industriales. Esto se debe a que esta planta es muy tolerante a los gases de escape de los automóviles y a la sal de las carreteras. Por lo tanto, el arbusto es ideal para proteger su propiedad urbana del ruido de la calle y de los gases de escape y al mismo tiempo protegerla de las miradas excesivamente curiosas de los transeúntes.

Brotación muy temprana

Tan pronto como los primeros rayos de sol calientan el aire, brotan las grosellas alpinas. Conserva su follaje hasta bien entrado el otoño. Durante este tiempo adquiere un atractivo color amarillo y aporta acentos brillantes.

Alta tolerancia de corte

La grosella alpina también se adapta bien a la poda severa. Proceda de la siguiente manera:

  • La poda debe realizarse inmediatamente después de la floración.
  • Corte los arbustos preferiblemente a mano y no con tijeras eléctricas. De esta manera se conserva la atractiva forma de la hoja y el seto no parece irregular.
  • Si quieres disfrutar de los frutos, conserva la mayor cantidad posible de inflorescencias muertas.

Consejo

La grosella alpina es una buena fuente de alimento para pájaros e insectos. Por ello, es uno de esos árboles que realzan los jardines desde el punto de vista ecológico.

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