Muchas palmeras que se cultivan en interiores contienen toxinas, especialmente en las flores pero también en las hojas. La palma areca, por otro lado, es una de las especies de palmeras que no son venenosas. Sin embargo, se recomienda precaución al cuidarla, ya que esta palmera se parece mucho a otras especies lamentablemente venenosas.
¿La palma Areca es venenosa para los bebés y las mascotas?
La palma Areca no es venenosa y, por lo tanto, puede conservarse de forma segura en hogares con bebés y mascotas. Sin embargo, tenga cuidado de no comprar especies de palmeras venenosas de apariencia similar y evite el acceso a hojas que puedan haber sido rociadas.
La palma Areca no contiene toxinas
La palma Areca no es venenosa y, por lo tanto, se puede mantener fácilmente en un hogar con un bebé o una mascota.
Sin embargo, existe el riesgo de que confundas este tipo de palma con otras palmas. Algunos de ellos son muy venenosos y no deben cultivarse en un apartamento con niños y animales.
Esto afecta principalmente a las palmeras de montaña, que se parecen mucho a la palmera Areca. Por lo tanto, a la hora de comprar, pida consejo a un experto sobre qué tipo de palmera tiene realmente.
Las palmas de areca se rocían con frecuencia
Incluso si las palmeras no contienen toxinas, las hojas no deben caer en manos de niños o mascotas. Las plantas que se encuentran en el mercado suelen estar pulverizadas. Si el bebé, el gato o el perro lo mastica, existe un riesgo real de que entren sustancias tóxicas en el organismo.
Coloque las palmeras de tal manera que ni los niños ni las mascotas puedan alcanzarlas.
Retire siempre inmediatamente las partes de las plantas que se hayan caído o cortado para que no se vuelvan tentadoras.
Consejo
La palma Areca crece bastante lentamente. Sólo crece de 15 a 25 centímetros más por año. Ocasionalmente, se forman brotes terrestres que pueden usarse para la propagación.