Su corteza hace que una haya común sea inconfundible. En los bosques, los árboles destacan por su brillo gris claro y su corteza de aspecto muy suave. A menudo se encuentra un polvo fino debajo de las hayas cobrizas. Éste es el corcho que se desmorona. Datos interesantes sobre la corteza de las hayas europeas.
¿Cómo se reconoce la corteza de una haya europea?
La corteza del haya común se caracteriza especialmente por su llamativo color gris plateado y su superficie lisa. En los árboles jóvenes, la corteza es de color verde oscuro a negro, mientras que con la edad se vuelve más clara y aparece finamente agrietada.
Identificar el haya europea por su corteza
- Árboles jóvenes: corteza de color verde oscuro a negro
- árboles más viejos: corteza de gris a gris plateado
- suave
- finamente agrietado
- grietas más grandes en árboles viejos
- La corteza no se cae
La corteza del haya joven
Las hayas jóvenes cobrizos se reconocen porque la corteza aún no tiene el típico color gris plateado. La corteza de los árboles jóvenes es de color verde oscuro, casi negra. En este momento la corteza todavía está completamente lisa y libre de grietas.
El corcho no se puede quitar en escamas
En la mayoría de los árboles, la corteza forma escamas gruesas, el llamado corcho, que se pueden desprender del árbol. Sin embargo, en el caso del haya común, el corcho no se descascarilla y no se puede quitar en su totalidad.
El corcho o el fellem se desmorona y se cae. Con el tiempo se forma una fina capa que cubre el suelo alrededor del haya cobriza.
La corteza de las hayas cobrizas cambia con la edad
Cuanto más envejece el haya europea, más claro se vuelve el color del tronco. La corteza se vuelve gris claro. Las cicatrices de las ramas caídas son claramente visibles.
El diámetro del tronco puede crecer hasta dos metros. La corteza se abre mediante finas ranuras longitudinales. La corteza no es tan gruesa y de vetas claras como, por ejemplo, la del roble u otros árboles forestales.
La corteza del haya común apenas ofrece refugio a los insectos. Las plagas tampoco pueden penetrar el árbol a través de la corteza ilesa. Sin embargo, el tronco del haya común es sensible a la luz solar y, por lo tanto, crece mejor cuando la zona inferior está protegida por árboles del sotobosque, como los carpes.
Consejo
En los hayedos se pueden encontrar ocasionalmente hayas comunes con una corteza muy gruesa y agrietada. Se trata de una variedad ligeramente diferente de la haya común, la haya de piedra con el nombre botánico Fagus sylvatica var.quercoides. Sin embargo, no debe confundirse con el carpe, que a veces también se conoce como haya de piedra debido a su madera dura.