Stevia, también conocida como hierba dulce u hoja de miel, prospera perennemente, pero no es resistente en nuestras latitudes. Con buen cuidado, puedes cosechar continuamente hojas de hierbas dulces durante la temporada de crecimiento y usarlas frescas o conservarlas.

¿Cómo cuido una planta de stevia?
Para cuidar adecuadamente una planta de stevia, riégala regularmente y evita el encharcamiento, fertilízala moderadamente y no más de una vez al mes, trasplantala regularmente, córtala para que crezca fuerte e hiberna en un lugar luminoso y sin heladas.
Las necesidades de agua de las hierbas dulces
A las plantas de stevia les encanta el cambio entre húmedo y seco y prosperan de manera óptima en estas condiciones. Por lo tanto, riegue la hierba de miel con regularidad y luego deje que la bola se seque hasta que se sienta ligeramente húmeda por dentro (prueba del pulgar). Sin embargo, asegúrese de evitar el encharcamiento, al que la hierba dulce reacciona con mucha sensibilidad.
Fertilizar moderadamente
Fertilice la planta de stevia con mucha moderación, porque, como muchas hierbas, la stevia se vuelve susceptible a enfermedades si recibe un exceso de nutrientes. Fertilice no más de una vez al mes durante la temporada de crecimiento y absténgase de aplicar fertilizante adicional durante al menos un cuarto de año después del trasplante.
Replantar regularmente
La stevia cultivada en macetas siempre debe trasplantarse cuando la planta se ha vuelto demasiado grande para su antigua maceta. Esta hierba dulce necesita mucho espacio para desarrollarse libremente y formar raíces de almacenamiento fuertes y planas. Por eso, elige ollas o cuencos generosos. Como sustrato para plantas es adecuada tierra para macetas normal o tierra especial para hierbas.
El corte asegura un fuerte crecimiento
Reduzca la hoja dulce con regularidad durante los meses de verano para que la planta crezca más fuerte y tupida. Antes de que las primeras noches frescas anuncien el otoño, conviene cortar la stevia a una longitud de unos diez centímetros.
Plagas y enfermedades comunes:
Cuando se cuida correctamente, la Stevia es una hierba muy insensible. La hierba dulce reacciona a la fertilización excesiva con tallos inestables y hojas de color verde claro poco desarrolladas. En este caso, no fertilices la planta durante algunas semanas. Las manchas blancas brillantes en la parte inferior de las hojas indican mildiú polvoriento u óxido blanco. Recorta estos brotes o combate la enfermedad de la planta con productos adecuados (13,00 € en Amazon).
Stevia que pasa el invierno:
Dado que la stevia es sensible a las heladas, la hierba dulce no puede pasar el invierno al aire libre. Desenterrar la stevia en otoño antes de las primeras heladas nocturnas y pasar el invierno la planta en un lugar luminoso.
Consejos y trucos
Stevia es muy valiosa para las personas que no pueden o no quieren consumir azúcar. Sin embargo, dosifique la hierba con mucha moderación, ya que desarrolla un sabor ligeramente amargo y dulce en caso de sobredosis.