Las maravillosas fresas silvestres no se limitan en modo alguno a crecer bajo los árboles en la naturaleza. No tengas miedo de cultivar la forma silvestre en el jardín. Las siguientes variedades han demostrado ser ideales para el huerto doméstico.

¿Cómo puedo cultivar fresas silvestres en el jardín?
Las fresas silvestres son fáciles de cultivar en el jardín y prosperan particularmente bien en lugares parcialmente sombreados. Las variedades populares incluyen Forest Queen, Rosa Perle, Kyrel, Blanc Amélioré y Alpine Yellow. Las plantas vecinas, como las judías verdes o los girasoles, proporcionan una sombra ideal.
Forest Queen y sus colegas se sienten como en casa en la cama
Una vez que los excursionistas han mordisqueado las fresas silvestres en el camino, se vuelven irremediablemente adictos a su sabor inimitable. Qué bueno que las siguientes variedades se puedan plantar y cuidar en el jardín para que puedas disfrutar del disfrute frutal incluso sin largas caminatas:
- Forest Queen: un adorno en cada cama con flores de un blanco puro y frutos de color rojo intenso
- Pink Pearl: esta robusta planta produce innumerables fresas rosadas incluso bajo árboles de hoja caduca
- Kyrel: los frutos alargados se elevan por encima de las hojas para facilitar la cosecha
- Blanc Amélioré: una rareza con fresas blancas, ideal para encurtir
- Alpine Yellow: frutas de color blanco y amarillo con un aroma único a frutos del bosque
La variedad Florika es perfecta para el cultivo como cobertura del suelo. Sus frutos están tan por encima del suelo que rara vez son atacados por plagas o moho gris. Además, esta fresa silvestre es tan robusta que prospera en el mismo lecho hasta 8 años.
Se desea sombra de las plantas vecinas
Si bien las fresas cultivadas sensibles no deben cultivarse en cultivos mixtos con plantas frutales y vegetales de alto crecimiento, esto es ciertamente bienvenido en el caso de las fresas silvestres. Las variedades presentadas se ubicarán preferentemente en un lugar semi sombreado, donde no caigan bajo el sol abrasador del mediodía.
No hay nada de malo en plantar fresas silvestres junto a judías verdes o girasoles. En las regiones vitivinícolas, los viticultores ingeniosos crean cada vez más prados de fresas bajo las vides. Esto no sólo tiene un aspecto decorativo, sino que también proporciona a los trabajadores que trabajan duro el disfrute de la fruta fresca para fortalecerlos durante la cosecha.
Consejos y trucos
La fresa silvestre no sólo puede ser rústica, sino que también tiene lo necesario para ser noble. La variedad Mignonette impresiona incluso a los gourmets. Sirva a sus invitados la fresa fresca del jardín en una copa de champán y reciba muchos elogios.