En su tierra natal, la azalea japonesa es uno de los árboles más populares para el arte del bonsái. Esto no es de extrañar, ya que la planta ofrece un espectáculo magnífico, especialmente durante el período de floración, cuando está cubierta por todas partes de flores grandes.

¿Cómo cuido adecuadamente un bonsái de azalea japonés?
Para cuidar de manera óptima un bonsái de azalea japonés, necesita un lugar parcialmente sombreado, un suelo especial para rododendro, riego regular, fertilización, corte y trasplante, así como protección contra la humedad.
Los bonsáis de azalea son bonsáis de exterior resistentes
A diferencia de la azalea de interior (¡que no es resistente!), la azalea japonesa no es apta para el cultivo de interior: es un bonsái puramente de exterior. No importa si está en el jardín, en el balcón o en la terraza: la azalea japonesa prospera mejor al aire libre y, por supuesto, con la protección adecuada, también puede permanecer al aire libre durante los meses de invierno.
Ubicación y sustrato
Las azaleas, al igual que los rododendros, estrechamente relacionados, prefieren un lugar parcialmente sombreado. Sin embargo, no debe estar completamente a oscuras, ya que debido a la f alta de luz y a la mayor humedad, las algas podrían depositarse en las plantas. La tierra especial para rododendro es la más adecuada como sustrato, ya que tiene el contenido de humus necesario y además tiene el valor de pH correcto: entre 4,5 y 5,5.
Riego y fertilización
Dado que la azalea japonesa no tolera la cal, solo debes regarla con agua de lluvia o descalcificar el agua del grifo. El encharcamiento también daña la planta, al igual que la sequedad excesiva. Mantenga el bonsái uniformemente pero ligeramente húmedo. Fertilice la planta durante la temporada de crecimiento con un fertilizante especial para azaleas o rododendro.
Corte y cableado
Las azaleas japonesas son bastante tolerantes a la poda y brotarán de manera confiable incluso después de una poda severa. Sin embargo, tiene sentido extender medidas de poda más extensas durante un período de varios años, ya que el árbol puede soportarlo mejor. Un corte en la madera vieja no suele causar ningún daño, ya que aquí también brota la azalea japonesa de los ojos dormidos. Cablear para forzar ramitas y ramas en una dirección determinada tampoco es un problema.
Trasplante
El bonsái de azalea japonesa debe trasplantarse aproximadamente cada dos años, idealmente en primavera o inmediatamente después de la floración. Tenga especial cuidado al cortar las raíces, ya que las raíces son muy finas y se rompen rápidamente.
Consejo
Cuando está demasiado húmedo, especialmente debido a la lluvia que viene desde arriba, la azalea japonesa es propensa a sufrir infecciones por hongos. Por lo tanto, protege el bonsái de la lluvia y riégalo siempre desde abajo para que las hojas, brotes y flores no se mojen.