Independientemente de su origen mediterráneo, el toronjil tiene una gran resistencia al invierno. Aún así, debes prestar atención a los siguientes consejos para pasar el invierno correctamente en la cama y en el balcón.
¿Cómo se puede invernar con éxito el bálsamo de limón?
Para que el bálsamo de limón pase el invierno con éxito, en otoño debes cortarlo cerca del suelo, colocarlo en la maceta en una pared sur protegida, colocar material aislante debajo y proteger el cepellón con plástico de burbujas o vellón y un capa de paja, hojas o matorrales.
Se recomienda podar antes del invierno
A finales de otoño, el bálsamo de limón comienza a extraer las partes aéreas de la planta. Este proceso se manifiesta en el marchitamiento de hojas y flores. El rizoma subterráneo no depende de las hojas para protegerse del invierno, por lo que es posible podar cerca del suelo sin ningún problema. Esta medida contribuye al aspecto cuidado del jardín. También crearás las condiciones para que el próximo año broten sin obstáculos.
Esto evita que el cepellón se congele en la maceta
Si bien el rizoma en el suelo está bien protegido de las heladas, esta ventaja no se aplica al bálsamo de limón en la maceta. Para garantizar que el cepellón no se congele y muera durante el invierno, se recomiendan las siguientes precauciones:
- Coloca bálsamo de limón en la maceta frente a la pared sur de la casa durante el invierno
- coloca la jardinera sobre paneles aislantes de madera o poliestireno (56,00 € en Amazon)
- envolver con plástico de burbujas o vellón grueso
- cubrir el sustrato con paja, hojas, maleza o aserrín
Si hay un trimestre de invierno libre de heladas, el bálsamo de limón lo aprovechará con gusto. Aquí puede estar oscuro porque en la estación fría no es deseable la brotación. Si todavía se desarrollan algunos brotes, se cortarán en primavera.
Consejos y trucos
En invierno, el toronjil se ve amenazado por el estrés de la sequía con mucha más frecuencia que durante el verano. Si la estación fría se caracteriza por heladas intensas, mucho sol y poca nieve, los meteorólogos hablan de heladas frías. En los días sin heladas, los jardineros aficionados con experiencia salen a regar la melisa de la maceta y del parterre con una regadera llena.