Desde la siembra hasta la plantación al aire libre, los tomates pasan por fases de crecimiento divergentes. Cualquiera que adapte la calidad de la tierra a las crecientes demandas tiene una clara ventaja. Te explicamos todos los detalles importantes sobre la tierra para macetas.
¿Qué suelo es mejor para los tomates?
Para los tomates, el sustrato de cultivo magro es adecuado para la germinación, la tierra mixta para el primer crecimiento y la tierra rica en nutrientes para el cultivo en camas o contenedores. Los ingredientes para mezclar tierra de alta calidad son: compost, tierra de jardín, fibra de coco/perlita, humus de corteza y arena.
Cultivo exitoso en suelo pobre
Los primeros pasos en la vida de una planta de tomate se dan en el sustrato más magro posible. Se requiere luz, calor y agua para que las semillas estén listas para germinar. Los nutrientes son más un obstáculo en este punto. Las sales minerales podrían dañar las tiernas raíces de las plántulas. Además, las plantas jóvenes no verían ninguna razón para el deseado crecimiento de las raíces, con una rica tabla de nutrientes justo delante de las puntas de las raíces.
Tierra para macetas recomendada:
- semillas o tierra de cultivo disponibles comercialmente (6,00 € en Amazon)
- Turba y arena mezcladas en partes iguales
- humus de coco puro como sustituto de la turba
- Suelo uniforme hecho de turba blanca, perlita y arcilla natural
¿Quieres algo más? – la tierra adecuada para pinchar
Después de la germinación, las plantas de tomate muestran el poder que tienen. El crecimiento avanza a un ritmo impresionante, por lo que la punción se realiza al cabo de unos días. Ahora se puede aumentar un poco el contenido de nutrientes del suelo, porque al fin y al cabo estamos ante grandes comedores. Estas mezclas de sustratos son adecuadas:
- tierra vegetal comercial, demacrada con turba, arena o perlita en una proporción de 1:2
- tierra de pinchazo estándar especial con una porción de abono verde (disponible en comercios especializados)
Los jardineros aficionados que valoran desde el principio un suelo de primera calidad lo mezclan ellos mismos. Los ingredientes son compost (25%), tierra de jardín (15%), fibra de coco/perlita (40%), humus de corteza (10%) y arena (10%).
Los tomates prosperan en este suelo hasta la cosecha
El cultivo exitoso produce plantas de tomate vitales y fuertes que ahora están hambrientas de nutrientes. Después de plantar al aire libre, los jardineros de tomates experimentados miman sus magníficos ejemplares con estas cualidades del suelo:
- en el lecho: suelo rico en humus, nutritivo, fresco, húmedo y permeable
- en el cubo: tierra vegetal o para macetas de alta calidad
En ambos casos, el sustrato se enriquece adicionalmente con abono de jardín maduro, virutas de cuerno, harina de cuerno o un abono orgánico adecuado.
Consejos y trucos
A pesar de todas las garantías de los fabricantes, el suelo de cultivo suele estar infectado por huevos de insectos, esporas de hongos o patógenos bacterianos. Antes de usar, simplemente esterilice el sustrato en el horno a 150 grados de temperatura superior e inferior durante 30 minutos. Es aún más rápido en el microondas a 800 vatios durante 10 minutos.