Las semillas de tomate necesitan el rango espectral rojo brillante de la luz solar para germinar. Por tanto, los botánicos los clasifican como germinadores ligeros. Sin embargo, con un rayo de luz sólo se cumplen una parte de las condiciones de germinación. Descubra qué más se incluye aquí.

¿Por qué los tomates son germinadores ligeros?
Las semillas de tomate son germinadores ligeros que requieren el rango espectral rojo brillante de la luz solar para germinar. Además, una temperatura constante de 18-24°C, semillas ligeramente húmedas y un tratamiento previo, como remojar en té de manzanilla tibio, son beneficiosos para la germinación.
El pretratamiento aumenta la preparación para la germinación
El cultivo de plantas de tomate detrás de un cristal comienza a finales de febrero/principios de marzo. Las semillas que usted mismo cosecha o compra no están naturalmente listas para germinar. Después de un simple tratamiento previo, el estado de germinación mejora enormemente:
- Remojar las semillas de tomate en té de manzanilla tibio durante medio día
- También funciona en jugo de ajo diluido en una proporción de 1:10
Este proceso no solo promueve la germinación, sino que también fortalece la resistencia a la infestación de esporas de moho.
La luz por sí sola no permite que las semillas de tomate germinen
Si las macetas de cultivo están llenas de sustrato pobre en nutrientes, siembre las semillas preparadas a una distancia de 3 centímetros. Las semillas se pueden cubrir con tierra o arena hasta un máximo de 0,5 centímetros. A partir de este momento, los siguientes factores deben complementarse para que las semillas de tomate germinen rápidamente:
- En un lugar parcialmente sombreado, llega suficiente luz a las semillas para que alcancen el rango espectral rojo claro
- hay una temperatura constante de 18 a 24 grados centígrados
- las semillas se mantienen ligeramente húmedas
La siembra no debe realizarse bajo la luz solar directa. Las tiernas semillas se echarían a perder en poco tiempo. La luz natural normal es suficiente para que los gérmenes luminosos se activen. En condiciones ideales, el periodo de germinación es de entre 10 y 14 días. El pinchazo se realiza en cuanto se ha desarrollado el primer par de hojas reales.
Consejos y trucos
Dado que los germinadores ligeros siempre corren el riesgo de ser arrastrados por el agua de riego, los jardineros aficionados inteligentes utilizan el siguiente truco. En lugar de regar las semillas desde arriba, administran el agua desde abajo. Para ello, se sumerge la mitad de las macetas de cultivo en agua. Debido a la acción capilar, el sustrato absorbe humedad. Tan pronto como la tierra de las semillas esté húmeda hasta la superficie, las macetas vuelven al invernadero interior (24,00 € en Amazon).