Gerbera no sólo proporciona acentos decorativos de color en el alféizar de la ventana o el balcón. Esta bonita planta tropical también se puede conservar bien en el jardín. O la cuidas como una planta de flores anual o hibernas la gerbera en el interior.
¿Cómo cuido adecuadamente las gerberas en el jardín?
Las gerberas del jardín prosperan mejor en un lugar luminoso y cálido con tierra suelta, bien drenada y bien enriquecida con abono. Se debe mantener una distancia de plantación de al menos 50 cm, dejar la corona de la raíz en la superficie del suelo y regar la planta con regularidad, pero no demasiado.
Gerberas de jardín: más robustas que las plantas de interior
Gerbera a menudo se siente más cómoda al aire libre que en el interior, en el alféizar de la ventana. Afuera recibe suficiente aire y luz y te lo agradece con abundantes flores.
Desafortunadamente, la mayoría de las variedades de Gerbera no son resistentes. Es por eso que la mayoría de los jardineros solo conservan la flor anual y la replantan cada primavera.
La variedad resistente "Garnivea", que está disponible en muchos colores y tamaños, ofrece una alternativa. Es parcialmente resistente y puede soportar temperaturas de hasta cinco grados bajo cero. Es recomendable elegir un lugar protegido y cubrir las plantas en invierno.
Cómo plantar gerberas en el jardín
- Elija un lugar luminoso y cálido
- Evitar el sol directo del mediodía
- Suelta la tierra
- Refinar con abono
- No plantes plantas demasiado profundas
- Presiona tierra
- Mantener bien húmedo, evitar encharcamientos
- Fertilizar una vez al mes
Las plantas se plantan tan profundamente en el suelo que la corona de la raíz permanece en la superficie del suelo. La distancia de plantación de otras plantas debe ser de al menos 50 centímetros. La gerbera desarrolla hojas bastante grandes que necesitan su espacio.
Asegúrese de que la tierra para macetas esté siempre ligeramente húmeda pero nunca mojada. Riega siempre la gerbera desde abajo.
Mantener gerberas en el jardín como plantas perennes
Dado que la mayoría de las variedades no son resistentes, tendrás que desenterrarlas en el otoño. Para ello, pinche generosamente el cepellón y coloque la planta en una maceta.
Pase el invierno la gerbera en un lugar luminoso donde las temperaturas estén entre 12 y un máximo de 15 grados. Durante el descanso invernal basta con darle un poco de agua una o dos veces al mes. No hay fertilización.
La gerbera se podrá volver a colocar en el jardín el próximo año después de los Santos de Hielo a finales de mayo.
Consejos y trucos
La tierra de tu jardín es muy firme, pero ¿no quieres que se pierdan las gerberas en tu macizo de flores? ¡Crea una cama elevada! La humedad no se puede acumular en un lecho elevado y todas las plantas reciben mucha luz y calor.