Si después del escarificado se acumulan montañas de musgo, la cuestión de su correcta eliminación se hace evidente. Felices los jardineros caseros que mantienen una pila de abono en el jardín. Por supuesto, el musgo no debe amontonarse al azar y dejarse solo. Lea aquí cómo hacer abono adecuado con musgo peinado.
¿Cómo compostar adecuadamente el musgo?
Para convertir el musgo en abono adecuado, extiéndalo en capas finas sobre la pila de abono, espolvoréelo con cal de algas o polvo de roca y agréguelo alternativamente con otros materiales orgánicos y tierra de jardín. Asegúrate de tener una proporción de mezcla equilibrada.
La podredumbre caliente mata las esporas de musgo
Si se amontona musgo peinado, se pudre y se forma moho en lugar del esperado material fertilizante orgánico que huele a suelo de bosque fresco. Además, las esporas permanecen intactas para que puedan esparcirse felices por el jardín. Por el contrario, en una pila de abono ejemplar se produce una podredumbre caliente que destruye las esporas a 50-60 grados centígrados, durante la cual el musgo también se transforma en un valioso abono. Cómo integrar correctamente el musgo en su pila de abono:
- Extienda el musgo escarificado del césped cubierto de musgo en capas finas sobre la pila de abono
- Espolvorear con lima de algas (28,00 € en Amazon) o polvo de roca
- Abono alternativamente con otros materiales orgánicos y un poco de tierra de jardín
Asegúrese de que la capa inferior de la pila de abono esté en contacto con el suelo y esté hecha de materiales gruesos, como esquejes de madera triturados. Sólo así los microorganismos y gusanos pueden acceder para cumplir su importante función de descomposición de los materiales. El musgo siempre debe compostarse en una proporción de mezcla equilibrada con desechos de cocina crudos, hojas, recortes de césped, cáscaras de huevo, plumas o estiércol de establo.
No hagas abono con musgo contaminado con fertilizante de hierro
Si se combate el musgo del césped con fertilizante de hierro, los restos peinados no tienen cabida en el abono. El sulfato de hierro II contenido en los fertilizantes de hierro es muy tóxico. Si el musgo contaminado llega al abono, propagará el veneno a sus plantas ornamentales y vegetales con cada proceso de fertilización en el lecho.
Consejo
En lugar de convertir en abono el musgo escarificado, simplemente utilícelo como cobertura del suelo para lugares sombríos, sombreados y frescos del jardín. Para ello son ideales los típicos musgos de césped, como el hermano arrugado Sparriger (Rhytidiadelphus squarrosus). Simplemente deje que el musgo peinado se seque, extiéndalo sobre agua y tierra pobre en nutrientes, húmeda y ácida.