El aloe vera, poco exigente, es popular como planta de interior. En el lugar adecuado prospera sin muchos cuidados. Las nuevas plantas de aloe vera son fáciles de cultivar a partir de retoños y esquejes. Todo lo que necesitas hacer es plantarlos en tu propio contenedor.
¿Cómo plantar y propagar aloe vera?
Para plantar aloe vera, separe con cuidado los brotes laterales, deje que las superficies cortadas se sequen y plántelas en un recipiente con tierra para suculentas o plantas de interior. Para esquejes, coloque los trozos de hojas en una mezcla de tierra para macetas y arena fina y mantenga la tierra uniformemente húmeda.
El aloe vera se cultiva a menudo en Alemania como planta de interior a pleno sol. Tiene una buena apariencia con sus hojas suaves y brillantes y sus flores amarillas, rojas o naranjas y puede usarse para el cuidado de la piel y como “farmacia verde” para problemas cutáneos y digestivos.
Plantar y cuidar el aloe vera
El aloe vera necesita mucha luz para prosperar, idealmente el alféizar de una ventana a pleno sol. Si compras aloe vera en verano, debes acostumbrarlo poco a poco al sol y a la luz brillante. Colócalos en una ventana del este durante unos días. Esto también hay que tenerlo en cuenta para las plantas jóvenes.
Antes de comprar, debes considerar si puedes ofrecer suficiente espacio a la planta de rápido crecimiento. El aloe vera se debe trasplantar a un recipiente más grande aproximadamente cada dos años. Si utilizas una buena tierra para suculentas te ahorrarás tener que abonar periódicamente. Por lo demás, el poco exigente aloe vera también se conforma con la tierra habitual para plantas de interior, mezclada con un poco de arena y turba.
Cuando se trata de cuidados, solo hay algunos consejos a tener en cuenta:
- asegurar un buen drenaje en la maceta,
- verter vigorosamente directamente sobre el sustrato, retirar siempre el exceso de agua,
- En verano, si es necesario, abonar con abono universal o especial para suculentas,
- no pasar el invierno afuera.
Propaga el aloe vera tú mismo
Para propagar, separe con cuidado los brotes laterales y plántelos en su propio recipiente. De antemano, las superficies cortadas de los retoños se dejan secar al aire para evitar que se forme moho. También puedes tomar esquejes de las hojas. Los trozos de hojas se colocan en una mezcla de tierra para macetas y arena fina. Coloque el recipiente brillante y cálido y mantenga la tierra uniformemente húmeda.
Consejos y trucos
Para mantener la planta vigorosa en forma, se deben cortar los brotes laterales y, si es necesario, las hojas más externas.