Muchas plantas de jardín o flores cortadas son inofensivas para los humanos, pero venenosas para mascotas mucho más pequeñas como perros, gatos o conejos. Gypsophila, también conocida como Gypsophila paniculata en latín, pertenece a esta categoría.
¿Es la gypsophila venenosa para los gatos?
Gypsophila (Gypsophila paniculata) es venenosa para los gatos porque contiene saponinas que pueden destruir los glóbulos rojos. En pequeñas cantidades no suele provocar reacciones graves, pero puede aumentar la permeabilidad intestinal. Mantenga a su gato alejado del aliento del bebé.
Esto se debe a las saponinas que contiene, las cuales bajo ningún concepto deben pasar al torrente sanguíneo. Allí destruyen los glóbulos rojos. Si se toman por vía oral (por la boca/boca), no se esperan reacciones significativas en pequeñas cantidades. Sin embargo, aumentan la permeabilidad del intestino. Esto significa que cualquier sustancia no deseada de los alimentos se absorbe más rápidamente.
Lo más importante en resumen:
- Gypsophila es venenosa, pero no mortal
- no debe ingresar al torrente sanguíneo
- en pequeñas cantidades ninguna/casi ninguna reacción
- promover la permeabilidad intestinal
Consejos y trucos
Incluso si la gypsophila no es mortalmente venenosa, debes mantenerla alejada de tu gato. ¡Cuidado también con la gypsophila en los ramos!