En verano, el calabacín a veces produce frutos mucho más rápido de lo que les gustaría a los propietarios del jardín. Sin embargo, esto no es motivo para regalar estas deliciosas patas, ya que también se pueden preparar maravillosamente en platos dulces.
¿Cómo preparar calabacines como postre?
Los calabacines son ideales como plato dulce. Pueden demostrar su versatilidad y ofrecer una deliciosa variedad tanto en un pastel de calabacín de chocolate con nueces como en una exótica mermelada de calabacín y jengibre.
Pastel de chocolate y calabacín
Este pastel es maravillosamente húmedo y tiene un sabor maravillosamente achocolatado al mismo tiempo. Para que quede crujiente, la masa se enriquece con nueces.
Ingredientes para un molde para pan
- 350 g de calabacín finamente rallado
- 240 g de harina
- 120 g de azúcar
- 120 ml de aceite de girasol
- 3 huevos
- 50 g de cacao para hornear
- 50 g de chocolate negro rallado
- 30 g de nueces partidas en trozos grandes
- 1 cucharadita de levadura en polvo
- 1 pizca de sal
Preparación
- Precalentar el horno a 180 grados.
- Batir los huevos con el azúcar hasta que queden esponjosos.
- Agregue el aceite.
- Mezcla harina, cacao, levadura en polvo y sal.
- Mezcla el calabacín con un tercio de la mezcla de harina.
- Añadir el resto de la harina con el chocolate rallado y las nueces partidas en trozos grandes a la mezcla de huevo y aceite e incorporar.
- Incorpora el calabacín a la masa.
- Vierte todo en el molde para pan previamente engrasado.
- Hornea unos 50 minutos.
- Deja enfriar el bizcocho durante diez minutos, desmoldalo y déjalo enfriar por completo.
- Si lo deseas, decora con azúcar en polvo o glaseado de chocolate.
Mermelada de calabacín y jengibre
¿Te encantan las mermeladas inusuales? Entonces nuestra mermelada de calabacín se adaptará exactamente a tus gustos.
Ingredientes
- 800 g de calabacín pelado y finamente rallado
- 1 trozo de jengibre del tamaño de un pulgar
- 1 kg de azúcar para conservar 1:1
- 1 – 2 chorritos de jugo de limón
Preparación
- Pelar el jengibre y picarlo en trozos muy finos.
- Pon todos los ingredientes en una olla grande y mézclalos.
- Tápalo y déjalo reposar durante una hora.
- Durante este tiempo, esteriliza los frascos y las tapas en agua hirviendo durante diez minutos.
- Lleve a ebullición la mezcla de calabacín y jengibre y déjela hervir a fuego lento durante unos tres minutos mientras revuelve.
- Haz una prueba de gelatina. Si la mermelada se solidifica, viértala directamente en los tarros de mermelada. De lo contrario, cocine por un minuto más.
- Cierra los frascos mientras estén calientes y déjalos enfriar boca abajo.
Consejo
La combinación de mermelada de calabacín y manzana o de calabacín y piña también sabe muy bien.