Las avellanas peladas tienen un sabor especialmente intenso y, a menudo, se utilizan molidas para hacer pasteles o galletas finos. Incluso cuando se comen semillas sanas, no hay problema con la piel, que a menudo tiene un sabor ligeramente amargo.
¿Cuál es la mejor forma de pelar las avellanas?
La mejor forma de pelar las avellanas es asándolas en una sartén o en el horno. La piel calentada y agrietada se puede frotar fácilmente con el paño de cocina. Alternativamente, puedes escaldar las nueces con agua hirviendo, pero este método es más laborioso y ofrece menos sabor tostado.
Avellanas peladas tostadas
Para pelar las avellanas, primero hay que quitarlas de la cáscara dura y luego tostarlas.
- Toma un cascanueces y úsalo para quitar las nueces de sus cáscaras.
- Toma una sartén grande, preferiblemente recubierta, y caliéntala en la estufa.
- Poner las nueces partidas y tostarlas sin añadir grasa.
- Siempre balancee la sartén hacia adelante y hacia atrás para evitar que las nueces se quemen y estropeen el sabor.
- Si la sartén es apta para horno, puedes meterla en el horno con las nueces a 180 grados durante unos diez minutos.
El calor hace que la fina cáscara de las nueces se seque y se agriete.
- Comprueba el tostado para que las nueces no se quemen en el horno.
- Si la piel se ha reventado, retira la sartén del fuego o del horno y vierte las nueces sobre un paño de cocina limpio.
- Dobla las esquinas de la tela hacia adentro sobre las tuercas.
- Frótalo con la palma de las manos para que la cáscara se desprenda de las nueces.
- Sigue clasificando las nueces peladas.
Repite el proceso hasta que a todas las nueces no les quede piel.
- También puedes volver a poner las avellanas en la sartén o en el horno si la piel aún no está lo suficientemente tostada.
- También es posible colocar las nueces debajo de la parrilla por un corto tiempo hasta que la piel reviente.
- Calentar en el microondas durante aproximadamente un minuto y medio también produce buenos resultados. Sin embargo, las nueces peladas de esta manera carecen del delicioso aroma tostado.
Avellanas peladas por escaldado
Al igual que las almendras, las avellanas partidas se escaldan con agua hirviendo. El calor y el agua aflojan la piel marrón y se puede pelar. Sin embargo, este trabajo es bastante laborioso ya que la piel sólo se desprende en trozos pequeños. Además, aquí también f altan los deliciosos aromas tostados.