La menta polar (Mentha pulegium), a diferencia de la menta piperita, no es apta para comer ni como planta medicinal natural. La menta polei contiene toxinas que pueden provocar síntomas graves de intoxicación si se consumen en grandes cantidades. Sin embargo, el envenenamiento no ocurre con frecuencia debido a la rareza de la menta polei.
¿Es venenosa la menta polei?
La menta polar (Mentha pulegium) es venenosa porque contiene la toxina pulegona. Si se consume, pueden producirse síntomas como vómitos, aumento de la presión arterial, parálisis e insuficiencia respiratoria. Si se sospecha consumo, se debe consultar a un médico inmediatamente.
Polymint es venenoso
La toxina que se encuentra en todas las partes de la menta polei es la pulegona, que está contenida en el aceite esencial. Si la sustancia se absorbe a través de la planta, se producen varios síntomas de intoxicación:
- Vómitos
- Aumento de la presión arterial
- Síntomas de parálisis
- Parálisis respiratoria hasta el cese
Si la menta polei se ha consumido accidentalmente, consulte a un médico de inmediato.
La menta polaca solía beberse como té para inducir abortos. Debido a las muertes que causa y también porque su aparición se ha vuelto muy rara, la menta polei ya no se usa como remedio natural en la actualidad.
Consejo
La menta polar se parece mucho a la menta no tóxica. La característica distintiva más importante son los estambres que sobresalen de las flores de la menta polei. La menta Polei también se puede reconocer por su garganta de flores peludas.