Existen numerosas especies de arces para el jardín o para guardar en macetas, que se cultivan principalmente por su hermoso follaje de color rojo. Los dos representantes más conocidos son probablemente el arce rojo japonés (Acer palmatum), disponible en numerosas variedades diferentes, y el arce rojo (Acer rubrum), que procede de América del Norte. Mientras que el arce japonés suele deleitarse con sus hojas rojas durante todo el verano, el arce rojo sólo muestra su esplendor de colores en otoño. Sin embargo, el enverdecimiento puede ocurrir en ambos casos por diferentes razones.
¿Por qué un arce rojo se vuelve verde?
Un arce rojo se vuelve verde si tiene muy poco sol, una ubicación inadecuada, un pH incorrecto del suelo o una fertilización excesiva con nitrógeno. Para mantener el color de la línea roja, asegúrese de que haya suficiente luz solar, un suelo ligeramente ácido a neutro y una fertilización moderada con sustancias orgánicas.
El enverdecimiento es normal para muchos arces japoneses
Primero que nada: En muchas variedades de arce japonés rojo, es completamente normal que el árbol solo muestre follaje rojo cuando brotan y en otoño. En verano las hojas son naturalmente verdes. Estas variedades incluyen, entre otras: variantes tan populares como 'Kotohime' o 'Deshojo'. Sólo unos pocos arces japoneses rojos muestran un color rojo intenso durante todo el período de crecimiento. Los arces japoneses que tienden a no reverdecer incluyen:a. 'Atropurpureum', 'Fireglow', 'Bloodgood' así como varias variedades de Dissectum (que también incluye el popular 'Garnet').
Hay muchas causas posibles para el enverdecimiento
Por otro lado, el enverdecimiento también puede tener varias causas, que generalmente pueden deberse a un lugar inadecuado, a demasiada o muy poca luz solar y/o a un abono inadecuado. Esto provoca un enverdecimiento prematuro en el arce rojo japonés, así como una f alta de color otoñal en el arce rojo canadiense.
Ubicación inapropiada
La f alta o cantidad insuficiente de luz solar suele ser la causa de que el color del otoño sea al menos débil o incluso total. Básicamente, la regla se aplica a los arces: cuanto más brilla el sol en el cielo, más intenso se vuelve el color del follaje. Sin embargo, esto no es una regla general, ya que algunas especies de arces prefieren un lugar parcialmente sombreado y reaccionan a la luz solar excesivamente directa poniéndose verdes.
Valor de pH incorrecto en el suelo
Otra razón por la que las hojas se vuelven verdes es el valor de pH incorrecto. Los arces prefieren un sustrato ligeramente ácido a neutro y se vuelven verdes tan pronto como se vuelven alcalinos. En tal caso, ayuda a mejorar el suelo con tierra ácida de rododendro.
Fertilización con alto contenido de nitrógeno
Por último, pero no menos importante, una fertilización excesiva, especialmente con nitrógeno, hace que el follaje se desvanezca. Los arces, independientemente del tipo y variedad, sólo deben recibir fertilizantes orgánicos de forma muy moderada y preferiblemente.
Consejo
Desafortunadamente, el enverdecimiento también puede ocurrir naturalmente en ejemplares más viejos: los arces más jóvenes, de hojas rojas, suelen tener un color más intenso y a veces lo pierden con los años.