Con sus delicadas flores que flotan como duendes sobre los delgados tallos, la aguileña parece inofensiva. ¿Pero es realmente eso o contiene toxinas en sus partes de la planta?
¿Es venenosa la planta de aguileña?
Aguileña (Aquilegia vulgaris) es ligeramente venenosa y contiene sustancias tóxicas como glucósidos que forman cianuro de hidrógeno y magnoflorina en todas las partes de la planta, especialmente en las semillas. El envenenamiento puede provocar síntomas como dificultad para respirar, náuseas, vómitos, diarrea, arritmias cardíacas y convulsiones.
Columbine es ligeramente venenosa
Columbine o Aquilegia vulgaris, como todas las demás plantas de la familia del ranúnculo, es venenosa. En comparación con otras plantas venenosas, se clasifica como ligeramente venenosa. Aún no se conocen los envenenamientos que provocaron la muerte.
Toda la planta contiene toxinas. Destacan las semillas que maduran entre julio y agosto. Contienen los niveles más altos de sustancias tóxicas. Un glucósido que forma cianuro de hidrógeno y magnoflorina son tóxicos.
Síntomas de intoxicación
Si comes aguileña por ignorancia, pueden aparecer síntomas de intoxicación. Sólo 20 a 30 g de hojas frescas (dependiendo del peso y la condición corporal) pueden provocar los siguientes síntomas:
- Dificultad para respirar
- Náuseas
- Vómitos
- Diarrea
- Arritmias cardíacas
- Calambres
Pero la aguileña no sólo es venenosa internamente. Incluso si entra en contacto con la piel, pueden notarse síntomas de intoxicación como irritación de la piel, enrojecimiento y ampollas. Para evitar esto, se recomienda usar guantes al manipular y especialmente al cortar la aguileña.
Secado y calentado no tóxico
Las toxinas pueden volverse inofensivas. Tan pronto como la aguileña se seca o se calienta, las toxinas se evaporan. Por lo tanto, la hierba plantada se puede cosechar y utilizar en mezclas de té o de forma externa, por ejemplo como cataplasma. Funciona contra:
- Reumatismo
- Gota
- Problemas digestivos
- Úlceras
- Abscesos
- Parásitos
Consejos y trucos
Debido a que la aguileña tiene un sabor amargo, los niños o los animales generalmente solo consumen pequeñas cantidades o escupen las partes de la planta inmediatamente.