El kumquat o naranja enana asiática es ideal como árbol ornamental o planta de interior y, con buenos cuidados y suficiente fertilización, incluso produce frutos comestibles. Sin embargo, en latitudes europeas no alcanza su tamaño original de hasta cinco metros.
¿Cómo se cuida un kumquat?
Un buen cuidado del kumquat incluye riego regular sin encharcamiento, fertilizante especial para cítricos, un lugar cálido y soleado en verano, hibernación sin heladas y, si es necesario, poda. Si se cuida adecuadamente, la planta produce frutos comestibles.
Al igual que otras plantas de cítricos, al kumquat no le gustan las corrientes de aire ni los vientos fríos. En verano se puede tener en el exterior como planta en maceta en el balcón o terraza. A ella le gusta el calor y el sol. Sin embargo, no resiste las heladas y, por lo tanto, requiere un cuartel de invierno adecuado.
Resumen de los consejos de cuidado más importantes:
- requerimientos de agua de moderados a altos
- fertilización regular
- muy sensible a la cal
- amoroso del calor
- da frutos comestibles si se cuida adecuadamente
Regar un kumquat
El kumquat es una de las plantas sedientas y conviene regar abundantemente en primavera y verano. Asegúrate de añadir periódicamente fertilizante especial para plantas de cítricos (6,00 € en Amazon). Esto favorece la floración y, sobre todo, la formación de frutos en años posteriores.
El cepellón nunca debe secarse por completo. Si el valor del pH del agua de riego es demasiado alto, su kumquat puede morir. Asegúrese de evitar el encharcamiento, de lo contrario las raíces de su árbol de kumquat se pudrirán. Por eso es absolutamente necesaria una capa de drenaje en la maceta para que el exceso de agua de riego pueda escurrirse fácilmente.
Trasplante de un Kumquat
Solo es necesario trasplantar un kumquat si la maceta se vuelve demasiado pequeña; de lo contrario, basta con cambiar ocasionalmente la tierra para macetas. Es mejor hacer esto al comienzo de la temporada de crecimiento en primavera. No se recomienda plantar en el jardín ya que el kumquat no resiste las heladas.
El kumquat en invierno
El kumquat puede incluso tolerar heladas ligeras durante un breve periodo de tiempo. Sin embargo, es mejor pasar el invierno sin heladas, en un lugar fresco y luminoso. Porque las raíces nunca deben congelarse. Sin embargo, las temperaturas justo por encima del límite de heladas son suficientes. La fertilización no es necesaria durante el invierno y se pueden reducir los riegos. Lo ideal es pasar el invierno en un invernadero o jardín de invierno.
Las enfermedades del kumquat
Como planta exótica, el kumquat lamentablemente es susceptible a enfermedades y plagas. Las arañas rojas y las cochinillas son especialmente molestas. Revise su kumquat con regularidad para detectar plagas, lave las partes afectadas de la planta y elimine las plagas. Sin embargo, la mejor protección es un cuidado adecuado, ya que las plantas debilitadas son especialmente vulnerables.
¿Tienes que podar un árbol de kumquat?
Un árbol de kumquat debe podarse con regularidad, especialmente si el espacio es limitado. Aunque en zonas más frías no crece tan rápido como en Asia, puede alcanzar un tamaño considerable. La mejor época para podar es la primavera después de las vacaciones de invierno. La poda también promueve la formación de una hermosa corona.
Consejos y trucos
El buen cuidado puede verse recompensado con frutas agridulces. Cuando ceden bajo la presión de los dedos y tienen un color naranja fuerte, están listas para cosechar.