Las hierbas siempre han sido parte de la dieta humana. Refinan nuestra comida y curan nuestras dolencias. Una forma especialmente atractiva de cultivar hierbas usted mismo es la espiral de hierbas. Fue inventado por Bill Mollison, uno de los “inventores” de la permacultura. A Mollison siempre le ha impresionado la capacidad de los aborígenes para vivir en armonía con la naturaleza e imitar su funcionamiento. Un símbolo aborigen de uso frecuente era la espiral. Mientras buscaba nuevas ideas para el diseño de jardines, a Mollison finalmente se le ocurrió la idea de integrar la forma de espiral en el jardín: así nació la espiral de hierbas.
¿Cómo planto correctamente una espiral de hierbas?
Para plantar de forma óptima una espiral de hierbas, coloque hierbas mediterráneas como tomillo, salvia o romero en la parte superior, melisa, hinojo, cilantro y capuchina en el medio y hierbas amantes de la humedad como cebollino, perejil y eneldo en el fondo.
Crear una espiral de hierbas en tu propio jardín no es difícil. Plantar una espiral de hierbas es divertido. Una búsqueda rápida de imágenes en uno de los motores de búsqueda le proporcionará algunas ideas de diseño. Si te gusta un poco más “salvaje”, opta por una espiral hecha de piedras apiladas sueltas. Las paredes de una espiral así diseñada también ofrecen suficiente refugio para insectos y animales pequeños. Si quieres algo un poco más preciso, también puedes construir la espiral con ladrillos cuidadosamente apilados. Las posibilidades de diseño casi no tienen límites.
¿Qué opciones existen para plantar la hierba en espiral?
La gran ventaja de plantar una espiral de hierbas es la disponibilidad de diferentes zonas climáticas en un espacio pequeño. Especialmente las hierbas mediterráneas se sienten como en casa en la parte superior del caracol de hierbas. El tomillo, la salvia, el orégano, el romero y la mejorana aman su lugar bajo el sol. Para la gama media son adecuados el toronjil, el hinojo, el cilantro y la capuchina. El extremo inferior del caracol de hierbas debe reservarse para las hierbas locales que aman la humedad: cebollino, perejil y eneldo, por ejemplo, son hierbas que allí están en buenas manos. Las pequeñas cuevas entre las piedras también se pueden plantado de hierbas.